La vida se compone de una suma de momentos. Los hay mejores, peores, intensos, de pena, que dan pena… y de alegría. Hay grandes alegrías, pero a menos que se tenga una vida artificial, son las menos, y pequeñas alegrías como la que tuve ayer. Y es que mientras paseaba por Carrefour encontré un montoncito de comics de Vertigo editados por Norma Ed. A un precio irresistible, 2,50 €. Teniendo en cuenta que en su día ya costaban casi 1000 de las antiguas pesetas, 2,50 es un precio más que apetecible. Así que después de una selectiva búsqueda me traje unos cuantos para casa; Animal Man, Barnum, El Diablo y Bloody Mary.
Alguien dirá que vaya porquería (por no utilizar otro tipo de adjetivo más escatológico) de alegría. Y yo contesto, pues pobre de ti que no sabes saborear los pequeños momentos de la vida.
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